Sinopsis
El invierno se acerca al Valle de Heledd y La Bendición de Vivian, la única posada de la ruta del bosque encantado, atiende a sus últimos clientes del año.
La regentan Lug, un mercenario de renombre que colgó su armadura para vivir de la cocina, y Gwenllian, una mujer elegante y de gran elocuencia que parece hacer magia.
En los seis meses que lleva trabajando para él, Lug apenas sabe quién es ella, ni qué la ha llevado a establecerse en aquella posada remota.
La llegada del invierno les dará la oportunidad de descansar, conocerse e investigar los secretos de la poca clientela que se atreva a cruzar las montañas. Al menos, hasta que una abominación se refugie en el bosque y empiece a dar caza a los habitantes del valle.
Opinión personal
Se trata de una novela corta que tiene un ritmo pausado de la narración. Es un libro muy cozy, de un posadero y su camarera y de cómo pasan un otoño y un invierno juntos. Los problemas a los que se enfrentan tienen que ver a la clientela de la posada y a ciertos misterios con respecto a quienes son ellos en realidad.
Si te gustan los libros llenos de acción, aventuras y movimiento, este libro no es para ti. Es, en cambio, un libro más bien para disfrutar con una taza de té caliente y una manta, un refugio en tiempos fríos. La posada de Lug se convierte tanto para los clientes como para el lector en un lugar seguro, cómodo, donde calentar los corazones y disfrutar de la buena compañía.
De lo que más me ha gustado ha sido la relación entre los dos protagonistas. Tienen una química increíble y son muy tiernos juntos. Si te gusta el slow-burn, pasa por aquí, amigo. Tienen una edad también que no es la frecuente de ver en historias de amor, lo cual los hace únicos.
Advertencia: No leer con el estómago vacío, el protagonista es un gran chef y te va a entrar hambre.
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